martes, 8 de junio de 2010

José Albi Fita


Poeta, novelista y traductor español nacido en Valencia en 1922, murió el 7 de Junio en Denia, con él se acaba una etapa de la poesía española, tal vez Albi ha sido el último de los grandes poetas de la postguerra, quien sin embargo mantuvo y conservó contacto epistolar y personal con otros grandes autores como Miguel Hernández, Rosales, Dámaso Alonso, Gabriel Celaya, Gerardo Diego, Joan Fuster, amigo y colaborador inestimable desde la infancia y tantos otros entre los que se encontraban sus queridos amigos Bellveser y Pedro de la Peña. 

Con raíces maternas procedente de Olvera, conservó siempre un gran amor por Jávea origen de  sus raíces paternas donde vivió y murió, al lado del mar por el que de siempre sintió un profundo amor y que fue una de sus grandes fuentes de inspiración.

Estudió Derecho en la Universidad de Deusto y Filosofía y Letras en Zaragoza, doctorándose en la Universidad de Madrid.

Fundador y director de Cuadernos literarios y Verbo, del anuario de Poesía española Anupe, y autor de una  Antología del surrealismo español. Ha sido además Crítico de poesía y de arte, conferencista y viajero infatigable. 

Albi fue uno de los mejores conocedores de la pintura del Renacimiento, en ella, concretamente en la obra de la familia Masip (Joan de Juanes) basó su tesis doctoral guiado por el Marqués de Lozoya, dicha tesis doctoral sirve aún hoy   como obra imprescindible de consulta. 

En su incesante búsqueda del arte reside un tiempo en Venecia y en Roma, desde donde envía a la redacción del periódico Informaciones las crónicas, especialmente sobre la bienal de Venecia, actividad que alternó con las clases que impartió en Roma sobre la Historia del Arte Español. 

El teatro también fue una de sus grandes aficiones y como tal dirigió a su retorno a Alicante la dirección del Teatro de Cámara donde se representó una genial adaptación de “Medea” entre otras obras, en radio Alicante dirigió semanalmente una emisión cultural. 

Sus poesías han sido traducidas al francés, inglés, alemán, y al hebreo moderno, e incorporadas a diversas antologías españolas, europeas y sudamericanas, autor de más de setenta libros de poesía nunca quiso comercializar sus obras que generosamente distribuyó entre amantes de la misma.

Premio de las Letras Valencianas por la Generalitat Valenciana en 2.002, obtuvo entre otros el premio Gabriel Miró por su novela El silencio de Dios, por dos veces obtuvo el premio Valencia de Literatura por Odisea 77 en 1977,  y en 1978 el premio Miguel Ángel de Argumosa por Elegía atlántica. Destinatario de mucho premios poéticos no quiso sin embargo hacer de ellos alarde y prefirió mantener un discreto silencio. Entre sus publicaciones poéticas merecen destacarse: Poemas del amor de siempre, Septiembre en Paris, Bajo palabra de amor, Elegías apasionadas, Piedra viva, Elegía atlántica en 1978, Javea o el gozo en 1992 y Esfinges en el año 2000. ©
 

Estrella de alta mar, márcame el rumbo...

Estrella de alta mar, márcame el rumbo.
Puerta del corazón, dame cobijo.
Enamorada miel, tenme en tus labios.
Arrebatada luz, ponme en tus ojos.
Paloma en libertad, cédeme el vuelo.
Palmera, cielo al fin, hazme a tu imagen.
Ámbito de mi fe, cólmame el gozo.
Mujer y nada más, sé toda mía.
Tú, mi dolor, mi sed, mi sobresalto,
mi júbilo y mi luz a manos llenas.
Revelación total, regocijémonos
Llave de mi ansiedad, dame la vida.
Hoguera de cristal, torre encendida, 
ensimismada alondra de la tarde,
gloriosa claridad, lirio iniciado, 
milagro de la paz y de la espiga.
Dame la paz, la paz, tú siempre amada.
Para siempre la paz y la esperanza.





José Albi (1922-2010)

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