Siete durísimos días a base de agua y suero han tenido su recompensa. Los dos sindicalistas de la CIG han finalizado su huelga de hambre, iniciada el 16 de octubre. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, celebrará una reunión con ellos a principios de noviembre para analizar las consecuencias del decreto del carbón.
Se cumple así el objetivo de los sindicalistas Fernando Blanco y Alberte Tallón: "Un encontro co ministro para explicarlle o gravísimo impacto negativo do decreto en Galicia".
Atrás queda una semana de encierro en una autocaravana, ante el Ayuntamiento de As Pontes. Según Fernando Blanco, del comité de empresa de Endesa-As Pontes, "iniciamos a folga pola falta de resposta do Ministerio, non debemos permanecer pasivos ante un decreto lesivo para a economía comarcal". Al ministro le pedirán "que nos explique con cifras que esta medida non perxudica a Galicia". También el parlamentario del BNG en Madrid, Francisco Jorquera, le preguntará el miércoles a Zapatero si evitará el daño sobre las centrales gallegas. Si se aplica un decreto que deja a las térmicas gallegas fuera de las ayudas, en Galicia desaparecerían 3.500 puestos de trabajo. Así lo indica la Xunta, que vaticina 1.200 millones de euros en pérdidas hasta 2015. Alcaldes y portavoces del PP en la provincia de A Coruña apoyaron ayer un manifiesto contra el decreto. Según el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, "non é razonable que o Goberno diga que as plantas galegas non terán problemas, cando a Comisión Nacional de Enerxía teme o seu peche".
A la reunión con Sebastián, los huelguistas de la CIG acudirán como "representantes do sindicato maioritario en As Pontes e Meirama". Reclamarán que "estas comarcas continúen traballando, non queremos que as térmicas deixen de funcionar como xa pasou en Astano". Para mantener viva la llama contra el decreto, Ferrol acoge este mediodía una gran manifestación. La plataforma formada por BNG, CIG, USTG, camioneros y Concello de San Sadurniño llama a la participación, en la plaza de España. Los secretarios comarcales de la CIG destacaron "a necesidade da unidade, necesitamos medidas contundentes contra os castigos de Madrid á nosa economía". El Gobierno socialista de Ferrol no apoya la protesta, aunque en su balcón ondea una pancarta negra colgada por el BNG: "Nós tamén vivimos do carbón".
Fuente: elcorreogallego. es
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