El Defensor del Pueblo es paciente

El ayuntamiento de Santander es, probablemente, la entidad administrativa más beligerante en contra de los autocaracvanistas.

El 10 de agosto de 2007 inicié una queja al Defensor del Pueblo contra la redacción del art.22.4 de la OM de Tráfico.

Después de varias vicisitudes el DP remitió al ayuntamiento de Santander una recomendación para que "...valore la oportunidad de modificar lo dispuesto en el artículo 22.4 de la Ordenanza Municipal de Circulación, de manera que supriman las limitaciones que afectan a las autocaravanas por el mero hecho de serlo, fundamentando dichas limitaciones, si proceden, en razones objetivas."

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Hasta la fecha el ayuntamiento de Santander ha hecho oidos sordos a las recomendaciones del Defensor del Pueblo, poniendo en evidencia los valores democráticos de los electos en el Consistorio de Santander.

Hoy he recibido un nuevo escrito del DP que dice, entre otras cosas;

"Como continuación al último escrito de fecha 20 de octubre de 2009, se le comunica que el órgano administrativo competente persiste en su actitud de no enviar la información pedida, en relación con la queja que presentó ante esta Institución, registrada con el número arriba indicado. En, consecuencia, se recuerda una vez más al citado organismo su deber de colaborar para el rápido esclarecimiento de la situación que planteaba en su queja."

Debemos recordar que a iniciativa del propio ayuntamiento de Santander se convocó a las asociacioones para debatir la forma de eliminar la prohibición de estacionamiento.

Que en una reunión el ayuntamiento se commprometió a retirar el texto prohibitorio, compromiso que no ha cumplido hasta le fecha.

Este hecho y la actitud de hacer oidos sordos a las recomendaciones del Defensor del Pueblo indican que al Consistorio de Santander y en especial a su Jefe de la Policía le tren al pairo los derechos de los ciudadanos y la legalidad, mientras no se demuestre lo contrario.

Arsenio