lunes, 11 de octubre de 2010

La policía disuelve una fiesta 'rave' con 500 jóvenes en una nave de Paterna - Los participantes pretendían bailar hasta las siete de la tarde pero fueron echados por invadir un recinto privado sin permiso

Todavía quedaban casi 12 horas de música y baile cuando la policía hizo acto de presencia, a primera hora de la mañana. Fue el principio del fin de una multitudinaria fiesta 'rave' que ayer de madrugada reunió a más de medio millar de jóvenes bajo el techo de una nave en desuso de Paterna.

Según confirmaron a LAS PROVINCIAS algunos jóvenes que acudieron al evento, «la música comenzó a sonar alrededor de la una de la madrugada y estaba previsto que finalizara sobre las siete de la tarde. De hecho, habían llegado disc-jockeys de varios puntos de España y algunos se quedaron sin pinchar su música».
El escenario escogido por los organizadores de la 'rave' fue Doppauto S. L. Chapa Metálica del Automóvil, una destartalada nave abandonada del polígono industrial l'Andana. El viejo taller se levanta entre la CV-35 y la carretera que lleva a la antigua discoteca Arabesco. El cartel con el nombre de la vieja empresa es prácticamente todo lo que queda de las instalaciones.
Al parecer, una patrulla de la Policía Local de Paterna fue la primera en descubrir que la propiedad privada había sido tomada por decenas de coches, jóvenes, botellas de alcohol, cervezas ya hasta una autocaravana.
El reloj marcaba las ocho de la mañana y los agentes realizaron algunos controles de alcoholemia a los jóvenes participantes en la 'rave'. En ese momento, la música aún atronaba en el recinto, pero al estar alejada de zonas pobladas no hubo protestas vecinales por molestias de ruido. Los agentes decidieron disolver la fiesta, bajo amenaza de confiscar los equipos de música, al entender que estaban en un recinto privado sin autorización.
El sonido cesó, pero los jóvenes no terminaron de desalojar la nave hasta casi las tres de la tarde. De ese modo, aguardaron a que bajara el efecto del alcohol antes de coger el coche para marcharse.

Cinco vehículos de la Policía Nacional y la Policía Local de Paterna participaron en la intervención. Sobre las tres de la tarde, salieron de la fábrica los últimos coches repletos de 'ravers' contrariados y con ganas de más fiesta.

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