El autocaravanista alcazareño, José Rios, explicó lo importante que son este tipo de instalaciones, para las personas que gustan de llevar la casa a cuestas, porque en España, son pocos los Ayuntamientos que se lo ponen fácil, porque no ven en ellos, turistas dispuestos a dejarse el dinero en su municipio.
Nada más lejos de la realidad, puntualiza Rios, para explicar que el autocaravanista, “es más viajero que turista, amante de conocer la cultura y las características de los lugares que visita y de empaparse de sus costumbres”.
Una forma de viajar que le lleva a comprar sus productos típicos, visitar sus recursos culturales y, por supuesto sus bares y restaurantes”.
En definitiva, es un viajero que apuesta por la libertad a la hora de viajar, pero eso no quiere decir que sea barato, “porque a veces, sale bastante más caro que contratar con una agencia, si tenemos en cuenta lo que cuestan las autocaravanas, los impuestos o el mantenimiento.
El Concejal de Turismo, Angel Parreño cree que a la ciudad le convienen este tipo de instalaciones, por dos razones fundamentales: la primer porque este tipo de turismo está muy ligado al turismo cultural y de interior, “que es justamente en el que Alcázar está especializado”.
La segunda razón es que el viajero de autocaravana acampa en el lugar donde encuentre las mejores condiciones para ello, pero después recorre la comarca “y Alcázar aspira, también en materia turística, a ser esa cabecera de comarca desde la cual se pueda abarcar La Mancha y todo el territorio del Quijote”.
El lugar elegido para el aparcamiento de autocaravanas, “es ideal, porque está situado en un lugar céntrico para mayor seguridad, muy cercano a la zona monumental y accesible a las vías de comunicación, como la Autovía de los Viñedos”.
Fuente: lanzadigital.com
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