Galicia vivió ayer una jornada blanca, fría y sin clases en al menos medio centenar de concellos. Las previsiones se quedaron cortas y a lo largo del día se pudieron ver precipitaciones en forma de nieve en gran parte de la comunidad. En ciudades como A Coruña no llegó a nevar aunque de madrugada cayó una intensa granizada y en Santiago y comarca varias zonas amanecieron cubiertas por un manto blanco. El frío fue el otro gran protagonista de una jornada durante la que, a pesar de todo, no se llegaron a alcanzar las temperaturas extremas del pasado lunes. En el interior de las cuatro provincias se registraron temperaturas bajo cero (la más baja en Manzaneda, donde el mercurio marcó -7,8 grados) y en ningún punto de Galicia se superaron los 9 grados de máxima.
Las carreteras de las cuatro provincias vivieron un día de caos, retenciones y circulación complicada, especialmente de madrugada y a primera hora, con una treintena de viales afectados según la DGT. La nieve y la presencia de placas de hielo dejaron atrapados a decenas de conductores en sus vehículos, sobre todo en la red secundaria aunque también hubo vías de alta capacidad afectadas. En la AG-53 entre Dozón y Ourense hubo que cortar unos minutos la circulación justo en el límite entre la autopista Santiago-Ourense y la autovía. En la AP-9, en la salida de Montesalgueiro (A Coruña) también se interrumpió el tráfico por la mañana debido a las dificultades con las que se toparon varios vehículos en el tramo de acceso a Curtis, donde Protección Civil tuvo que remolcar incluso a una ambulancia. Y en la A-6 dirección Madrid a la altura de Guitiriz el tráfico quedó interrumpido por la mañana y durante varias horas la circulación fue muy complicada.
Además, varias nacionales, como la N-550 a la altura de Mesón do Vento o la N-634, en Devesela (Curtis), sufrieron retenciones e incluso cortes momentáneos. La red secundaria, con todo, fue la más afectada, con vías intransitables y otras en las que las dificultades para circular obligaron a intervenir a la Guardia Civil, restringiendo el tráfico de vehículos pesados e incluso habilitando desvíos alternativos, como en O Carballiño.
Camiones bloqueados
Camiones bloqueados
En total, el 112 registró hasta las 19:30 horas 337 incidencias relacionadas con la nieve y el hielo, la cifra más alta desde que el pasado fin de semana una masa de aire frío del ártico se situó sobre Galicia. Decenas de camiones y autobuses quedaron bloqueados por toda Galicia, dado que su gran tonelaje y la tracción trasera les hace más vulnerables cuando el hielo o la nieve aparece en el asfalto.
Las dificultades en las carreteras afectaron especialmente al transporte escolar. Un total de 22:129 estudiantes no pudieron asistir ayer a clase, unos problemas que afectaron a 230 centros educativos. Las provincias más perjudicadas fueron las de Lugo y Ourense, donde cerraron 27 y 42 colegios, respectivamente, y hubo algunos que adelantaron la hora de salida para evitar coincidir con las nevadas más intensas.
La decisión de cerrar o continuar con normalidad las clases, en todo caso, quedó en manos de los centros, lo que se convirtió ayer en motivo de polémica entre sindicatos y Xunta. STEG y CIG tildaron de "irresponsabilidad política" la decisión de la Consellería de Educación de delegar en los directores, que en su opinión actuó con "total ineficacia". El presidente gallego, sin embargo, defendió ayer la medida frente a la opción de "cerrar todos los colegios" y aseguró que más del 90% del alumnado no tuvo problemas.
La acumulación de nieve en la red viaria provocó, entre otras incidencias, que seis personas, dos ocupantes de un turismo y cuatro de una autocaravana, fueran evacuadas en el municipio de Lobios (Ourense) a un hotel para refugiarse. El coche se había salido de la vía y la autocaravana quedó bloqueada sin poder continuar con la ruta.
También hay decenas de pequeñas localidades aisladas y en el caso de Pedrafita, en Lugo, solo fue posible circular durante todo el día con vehículos de tracción a las cuatro ruedas.
Fuente: farodevigo.es
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